Todos los hombres de Rubalcaba

2 comentarios en “Todos los hombres de Rubalcaba”

  1. Yo también soy de los que piensan que cuando uno recibe el porrazo de un policía es porque esaba en el sitio equivocado, a la hora equivocada y haciendo algo que sabía que no debía hacer. Casi siempre. El problema es que en este país -a años luz de Egipto, para bien, por supuesto-, enviar antidisturbios a cualquier concentración con más de 100 personas se ha convertido en el recurso más habitual. Si yo fuera policía, dado que vivo en un país estable y democrático, me preguntaría por qué entonces me veo tan a menudo obligado a reprimir a los ciudadanos a través de la violencia. Yo respeto a un policía como ciudadano, primero, y como trabajador, después. No respeto a una persona que se pliega a las órdenes de una autoridad a menudo no cualificada para el cargo sin tan siquiera revisar las motivaciones éticas de esas órdenes. Igual que no respeto a un medio de comunicación público cuando miente. En Egipto el Ejército se negó a sofocar las manifestaciones (por supuesto, mucho más numerosas y trascendentes que la #acampada), me gustaría que alguna vez el jefe de una unidad antidisturbios le dijera a un Delegado del Gobierno, «esta gente esta pacíficamente acampada en una plaza. Habrá que desalojarlos, pero convenciéndoles, no mediante la violencia».

    Un padre pega a un niño porque está a punto de cruzar la calle en rojo. Una acción que muchos tacharán de desproporcionada pero que genera inequívocamente la reacción de no volver a cruzar en rojo. Bien. Pero si el padre pega al niño por cruzar la calle en rojo, por no comer la sopa, por no hacer los deberes, por no querer bañarse, por romper el jarrón con la pelota, por mancharse la camiseta, por no saber leer, por pedir un helado, por querer ir a la piscina… el padre se convierte en ese tipo de «hijo de puta» del que hablaba antes. Ese que es capaz de quitarle el caramelo a un niño. Este es el problema en España. Que el padre, o sea el gobierno sofoca sus problemas a porrazos. Ayer tenía un problema y serio. Jóvenes mostrándose tan desencantados con la izquierda como con la derecha. Ese #nolesvotes que tanto les escuece a los ‘rojos’, porque los pone al lado de los otros en las mismas condiciones. No sé de qué se extrañan. Y el Gobierno, una vez más, se quitó el problema como de costumbre. A golpes.

  2. En este asunto lo cierto es que mi postura varía dependiendo de como ande el viento, como una veleta.

    Puedo entender, y entiendo, e incluso comprendo la postura de los manifestantes y suscribiría cada una de las reclamaciones que exponen acerca del sistema democrático en España. Pero no entiendo la negativa hacia una orden dada por un cuerpo de seguridad. Mas que democracia, ese acto, aun tratando de ser un baluarte del civismo y una alta moral democrática se convierte en una irresponsabilidad hacia todos esos valores .

    Plantarte delante de un policía, como se ve en algunos vídeos, no utilizando consignas «políticas», si no recurriendo al famoso y consagrado «Hijo de Puta» o «Madero de Mierda» no da mas valor a la postura que se pretendía defender, para mi, tira por el suelo todo lo defendido anteriormente.

    La policía culpable?? en serio puedes comparar un estado de corrupción policial , gubernamental, judicial e incluso asumida hasta , gracias a *** , hace apenas dos dias por el pueblo egipcio con el estado español?? No puedo poner al mismo nivel una revuelta que levanta literalmente un pais en contra de su gobierno iniciando una «revolucion» en medio Oriente con unos cuantos desalojados en Madrid, no creo que sea equitativo en ninguno de sus puntos. El principal es que en Egipto no se respetaban los derechos humanos y de momento, en lo que llevamos de democracia en España, aqui se cumplen siempre, y maravillosamente si tenemos un sistema judicial al que recurrir si se ven mermados nuestros legítimos derechos.

    Y para mi el principal problema ha sido ese, se ha tratado de que la revuelta democrática que se pretende iniciar en España tenga el mismo calado o la misma importancia que las vividas en Oriente Medio estos meses anteriores. Y a todas luces eso es algo imposible, nos guste o no podemos votar cada cuatro años y elegir a nuestros representantes. Si estos lo hacen rematadamente mal, como así sucede actualmente, no necesitamos de ninguna acción subersiva para desalojarlos de sus poltronas, es a la sociedad en general hacia la que hay que mirar, es a ella a la que pedir responsabilidades por lo sucedido.

    Es el nivel de aborregamiento lo que provoca que un político nefasto esté en un puesto de poder, por si mismo, por mas malo que parezca y sea no tiene el poder propio de perpetuarse «ad eternum» en el sillón, es la sociedad la que lo capacita para ello.

    No se, como he dicho entiendo la postura de los manifestantes, pero desde pequeño siempre me enseñaron a respetar a la policía, por ello la postura lógica y coherente hubiera sido desalojar y presentar al día siguiente o en ese mismo momento la denuncia correspondiente utilizando uno de los cauces democráticos que tenemos. Hasta donde llego, lo cierto es muy poco, negarse a cumplir una orden dada por un cuerpo de seguridad del estado no ha sido nunca muy democrático.

    Saludos pa tos

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